Es duro y difícil para un pintor, también muy arriesgado, el exponer y exponerse a presentar la labor artística de casi una vida de dedicación a la pintura. Máxime en circunstancias de faltarle gran parte de obra realizada en la etapa de mas dedicación y aliento, como es la mexicana. Si alguna justificación puede tener la obra expuesta es que la honestidad presidió siempre mi quehacer artístico. Como los años proporcionan humildad, al menos en mi caso, solo me restaría decir que “el que hace lo que puede, hace lo que debe”.
Parte de la obra realizada en la etapa mexicana, a principios de los 60, pertenece a la Colección Suárez de México D.F.